Conflicto diplomático: Ecuador y Argentina expulsan a sus embajadores por la fuga de la exministra Duarte

El canciller ecuatoriano Juan Carlos Holguín informó este martes que su país declaró al embajador argentino en Quito, Gabriel Fuks, persona no grata.

Lo confirmó en una rueda de prensa que marcó la escalada bilateral por el caso de la exministra María de los Ángeles Duarte, funcionaria en la administración del exmandatario progresista Rafael Correa (2007-2017), quien estuvo refugiada durante dos años en la embajada argentina en Ecuador y se fugó a Venezuela en una situaciones no claras.

Con esta decisión, Fucks fue expulsado por el gobierno de Guillermo Lasso y deberá abandonar ese país dentro de las próximas 72 horas.

Luego de que se conoció esta decisión, el canciller Santiago Cafiero dispuso lo mismo con el embajador ecuatoriano Xavier Monge Yoder. Según informó Clarín, el funcionario ya viajaba este martes hacia Quito.

“Se ha decidido adoptar, por nuestra parte, la misma situación con respecto al embajador ecuatoriano en Argentina. El Gobierno argentino ha tomado con sorpresa y profunda tristeza la decisión de Ecuador de escalar el desacuerdo existente respecto a la situación de la señora María de los Ángeles Duarte Pesantes y llevarlo a nivel de perjuicio en la relación bilateral”, indicó Cancillería en un comunicado.

Gabriel Fuks.

Conflicto con Ecuador: qué dijo la cancillería argentina

A través del comunicado, la Cancillería manifestó que la administración de Alberto Fernández recibió “con sorpresa y profunda tristeza” la decisión de Ecuador de “escalar el desacuerdo” en torno a la fuga a Caracas de Maria de los Angeles Duarte Penantes

El Ministerio de Relaciones Exteriores, que conduce Cafiero, consignó que “más allá de las diferencias puestas de manifiesto tras el pedido de asilo diplomático” de Duarte Pesantes “por parte argentina”, además del “rechazo a la concesión de dicho status y el consiguiente salvoconducto por las autoridades ecuatorianas”, era de “público conocimiento” que la exfuncionaria “continuaba alojada en la legación argentina”.

María de los Ángeles Duarte, exministra de Correa, se fugó de la embajada argentina en Quito.

“Aún cuando se informara oportunamente a las autoridades ecuatorianas ni bien se pudo verificar, recién el lunes 13 de marzo, que la mencionada huésped había abandonado el predio de la Embajada -sin consulta ni previo aviso a ninguna autoridad de la Embajada argentina, lo cual fue reconocido por comunicados oficiales del Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana ecuatorianos emitidos ese mismo día, no existe norma internacional alguna que obligara a las autoridades diplomáticas argentinas a ejercer custodia sobre Duarte Pesantes”, expresó la Cancillería.

La cartera aclaró de todos modos que el “profundo aprecio al pueblo del Ecuador no habrá de variar con esta situación coyuntural”.

Ecuador: la fuga de la exministra Duarte

A través de un comunicado, la Cancillería ecuatoriana informó que la fuga de Duarte fue advertida al Ejecutivo ecuatoriano por el canciller de Argentina, Santiago Cafiero.

“Cafiero se comunicó con el canciller (ecuatoriano) Juan Carlos Holguín y le manifestó que la señora María Duarte escapó de la Embajada de Argentina de Quito, sin conocimiento del personal de su Embajada que mantenía en su jurisdicción a la prófuga de la Justicia ecuatoriana”, afirmaba el Ministerio de Relaciones Exteriores, antes de que escalase el conflicto entre los países.

Además, señalaron que el viceministro de Relaciones Exteriores, Luis Vayas, “ha conversado de manera inmediata con el embajador de Argentina en Ecuador, Gabriel Fuks, para conocer más detalles de esta situación”.

María de los Ángeles Duarte, exministra de Correa, se fugó de la embajada argentina en Quito.

“Tan pronto se conoció el hecho, la Policía nacional ha activado los protocolos de búsqueda y captura de la señora Duarte, condenada por actos de corrupción”, agregaba la Cancillería ecuatoriana.

Ecuador “ha presentado un enfático reclamo a la Argentina y ha exigido la entrega de información”, apuntó la Cancillería ecuatoriana y aseguró que “tomará las medidas más adecuadas ante este incidente”, apuntaban.

El Gobierno del presidente de Argentina, Alberto Fernández, había comunicado el pasado 1 de diciembre a la Cancillería ecuatoriana su decisión de conceder el asilo a Duarte, que llevaba refugiada en la Embajada argentina en Quito junto a su hijo menor de edad desde el 12 de agosto de 2020.

Sin embargo, el Gobierno del conservador presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, se opuso a otorgar a Duarte el salvoconducto que le permitiese salir del Ecuador rumbo a Bélgica sin ser detenida.

La firma de abogados que defienden al expresidente Rafael Correa, también condenado por corrupción, afirmó que el Gobierno de Lasso supuestamente había violado el derecho internacional al negar un salvoconducto para que Duarte pueda ir a Argentina.

El despacho belga, Ius Cogens, que también lleva la defensa de varios colaboradores de Correa acusados de corrupción, había asegurado que “Argentina tenía el derecho y el deber de conceder asilo a María de los Ángeles Duarte”, quien en 2020 fue condenada a ocho años de cárcel por cohecho dentro del caso conocido como “Sobornos”, en el que también fue sentenciado Correa y otros excolaboradores de él.

Aunque los imputados niegan los cargos y aseguran que se trata de una persecución judicial (“lawfare”) organizada por sus adversarios políticos, la Cancillería ecuatoriana ha asegurado que el juicio contra Duarte concluyó antes de que el actual Gobierno asumiera el poder en mayo de 2021.

Duarte, que ocupó la cartera de Obras Públicas entre el 19 de febrero de 2015 y el 6 de enero de 2017, se considera una perseguida política y niega los cargos en su contra, igual que el expresidente Correa, que tiene la condición de refugiado en Bélgica, lo que traba una solicitud de extradición de la Justicia ecuatoriana.

Correa, que reside desde 2017 en Bélgica, ha mantenido una estrecha relación con el actual mandatario argentino y con la vicepresidenta Cristina Fernández.